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Es importante recordar que la custodia y cuidado personal de un menor es un derecho que cobija a todo niño, niña y adolescente (NNA) y que tiene protección no solo constitucional sino también supranacional. Es así como los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a que sus progenitores asuman de manera directa, integral y permanente su custodia y cuidado personal para procurar la garantía de su desarrollo afectivo, social, mental y físico. Podemos decir que los criterios esenciales para la asignación de la custodia de un menor son básicamente los lazos afectivos más fuertes que tenga el mismo, la capacidad económica de quien la reclama y el entorno psicosocial en el que va a crecer y desarrollarse integralmente.
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Las opiniones aquí expresadas corresponden a Carolina Fonseca Guzmán, no expresan el pensamiento o filosofía de Litigius S.A.S.